En el Nº 67, del año 2014, de la Revista
Fermentum, aparece publicado el artículo de mi autoría titulado “Una
aproximación a la comprensión de la geopolítica de las religiones”, en el que
se aborda el tema de las religiones visto desde cuatro perspectivas
geopolíticas: como una realidad, como una disciplina, como una visión y como
una estrategia.
Hablar de manera específica de geopolítica
de las religiones, significa hablar de rivalidades de poder y de influencias
entre diversas fuerzas políticas que tienen por objetivo el control, la conquista,
la defensa o la utilización de un territorio, en las que el factor religioso
tiene una importancia decisiva. Se trata de la geopolítica en la que participan
seres humanos que pueden ser identificados como seguidores de determinada
religión.
La geopolítica de las religiones como una
realidad se refiere a aquello que existe en términos de rivalidades de poder y
de influencias en un territorio, bien sea a escala planetaria, continental,
subcontinental, nacional, regional o local, en las que los seres humanos participan, tengan o no
consciencia de ello. En tal sentido, los medios de comunicación, día tras día,
dan cuenta de la realidad geopolítica, a través de los cuales el común de las
personas se informa acerca de algunos acontecimientos. En cada porción de
territorio hay uno o varios grupos humanos con creencias, prácticas y ritos
religiosos, y allí surgen los fenómenos geopolíticos religiosos. Para efectos
de análisis, se procede a identificar y caracterizar a los grupos humanos, las
formas de lucha y el territorio donde y por el que se lucha.
La geopolítica de las religiones como
pensamiento o visión tiene que ver con lo que debería ocurrir en, o cual debería ser
la función de, un territorio. Un caso de interés es el de las visiones geopolíticas contrapuestas que en su momento
tuvieron dos organizaciones político-religiosas consideradas como
fundamentalistas. Se trata de las visiones relacionadas con los antiguos territorios
palestinos, de la organización islámica Hamas y de la organización judía Kach.
La visión de Hamas implica el establecimiento de un Estado islámico en la
región histórica de Palestina, que comprendería los actuales Israel,
Cisjordania y la Franja de Gaza, con capital en Jerusalén. Kach, por su parte,
organización fundada en 1971 y prohibida en 1988, consideraba que en los
territorios palestinos se debía restaurar el país bíblico de Israel, lo que implicaba
la expulsión de todos los árabes.
La cuarta perspectiva bajo la cual se
considera la geopolítica es como una estrategia, es decir, como una estrategia
geopolítica. En este sentido, se trata del diseño e implementación, por parte
de actores específicos, de una estrategia geopolítica para intervenir en una
realidad geopolítica existente en un territorio. En una estrategia geopolítica
religiosa, se procede a la instrumentalización de la religión en el desarrollo
de dicha estrategia, con el objetivo de controlar, conquistar, defender o
utilizar un territorio. Un ejemplo es la estrategia geopolítica religiosa desarrollada
por los pentecostales en Brasil, lo que
les ha permitido representar, en conjunto con los evangélicos tradicionales, el
22 % de la actual población total de Brasil, en comparación con el 15 % que representaban
para el año 2000.
Por Alfredo Portillo